Pinochet, cacareo y travestismo

Sin duda alguna, la semana recién pasada fue una de las más complejas del último tiempo para los Pinochet.

El martes 22, el ex Comandante en Jefe del Ejército, se enfrentó cara a cara con el ex jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), Manuel Contreras, antes el juez Víctor Montiglio.

Por si esto no parece sorprenderlo, Augusto José Ramón está con prisión domiciliaria producto del juicio que se lleva a cabo por la “Operación Colombo” y por otro proceso que mediáticamente ha sido más devorado: El caso Riggs.

Y si esto aún no le parece digno de seguir poniendo atención a esta columna, el General cumplió 90 años.

Pues bien, si le parece que cada uno de estos temas no merece mayor difusión, espero que los tres juntos sí lo hagan.

Vamos uniendo:

El Careo: Manuel Contreras entregó documentos de su estadía militar con felicitaciones de puño y letra de Augusto Pinochet. Eso, según fuentes de prensa, demostraría que Pinochet era el máximo líder de esa organización.

La “cárcel”: Luego del histórico encuentro, cada uno se retiró a sus cárceles respectivas. Contreras a su cabaña con Internet, televisión y un verdoso patio. Y Pinochet, a su mansión, ubicada en La Dehesa.

El Cacareo: Una treintena de adherentes llegó hasta la casa de Pinochet a cantarle, como cada año, el “cumpleaños feliz”. Todo bien, hasta que (no si no) apareció la figura chascona del notero de Caiga Quien Caiga, Iván Guerrero.

Una de ellas, le aseguró al periodista: “¿Pensaste que no quedaban pinochetistas?, todavía quedan huevón, todavía quedan, y eso te duele”. Sinceramente, lo que más le debe haber dolido a Guerrero fue el sinnúmero de golpes que recibió su zona glútea, y eso que esta vez no fue producto de los agarrones. Debe haber entendido Iván, que las fanáticas al General son muy buenas futbolistas.

Es raro lo que pasa con CQC y el fanatismo. Hace meses atrás, sacaron a charchazo limpio a Sebastián Eyzaguirre del edificio Diego Portales por ir a meterse a la proclamación que le tenía el Partido Socialista a Michelle Bachelet, acusándolo de “momio” y “fascista”. Hoy es al revés. Los partidarios a la Dictadura, Régimen Militar, Gobierno Militar o como le guste usted llamar a los 16 años de Pinochet en el poder, vociferan a grito pelado que en el “Caiga…” son "comunistas" y "marxistas".

Entonces, ¿a quién acusamos ahora de travestismo político?

Hans Lagos B.