Así que puedes despedirte de esta chica con un beso
Bridget es como nosotras. Bridget toma vodka y fuma. Bridget lucha por controlar su cuerpo, lee libros de autoayuda, jura que irá al gimnasio y después come donas y/con helado. Y para variar, Bridget sueña con el hombre ideal. Algo así como una Myriam Hernández del 2000, que grita por encontrar al “hombre que yo amo”…ese que tiene algo de niño, la sonrisa ancha, tierna la mirada...Una cosa de locos. Esa es Bridget Jones, el icono de la mujer moderna por excelencia. No exagero.
No recuerdo como fue que vi “El diario de Bridget Jones”, sólo recuerdo el sentimiento y la sensación que quedó cuando ésta terminó- una sensación que creo fue general en todas mujeres que vemos el film- “¡¡¡OH, Dios mío, yo soy Bridget Jones!!!” Sólo que ni el sexy de Hugh Grant o el galán de Colin Firth se pelean por mi. A lo más me gusta un chico que no lo sabe. Y ahí decimos- con un gran grito en silencio- ¡Soy sólo lo peor de Bridget! Pero no todo es tan malo… Bridget luego se convierte en ganadora. Adiós la mujer-objeto, bienvenida la mujer-fuerte.
Pero no nos creamos todo lo que vemos. Obviamente la señorita Jones es un personaje, uno bien recargado (llanto…). Porque (obviamente) no existe un Mark Darcy. Hay muchos Daniel Cleaver, pero Mark, esos quedaron en el pasado. Los Darcy se extinguieron con los dinosaurios. Es como esa cadena que mandan por mail: “Encuentra un hombre que te llame bonita, en lugar de sexy” ¡Patrañas! ¡Patrañas! A Bridget no le sirvió ser bonita, Bridget prefiere ser sexy. Igual las esperanzas nunca se pierden, esperemos que haya quedado un vestigio del gen “Darcy” dando vuelta, para no perder la fe.
Y suena en la película el roquero ritmo de Sheryl Crow cantando una suave letra: “Kiss that girl”. Me obsesioné con esa canción- que alguna vez la escuche en un CD de viaje de mi hermana y la encontré muy “girl power”- ¡Aparte Sheryl es seca! (f it makes you happy/ It can't be that bad/ If it makes you happy/Then why the hell are you so sad?).
La canción dice más o menos así:
But that girl is only in your mind/ She's leaving everything behind/ She's not the girl that's gonna make it right/ Sure you can kiss that girl goodbye/
(Pero aquella muchacha está sólo en tu mente/ Está dejando todo atrás/ Ahora no es la chica que va a hacer las cosas bien/ Así que puedes despedirte con un beso)
¿Es o no girl power? Una canción con actitud de “talk to the hand, you lost”. Mezcla de Nanny Fine con J Lo (en la época de P. Diddy). Algo así como “hasta aquí llego la Bridget antigua, bienvenida la nueva, despídete de mi yo-pasado con un beso y sigamos adelante, soy otra, y si no te gusta, te vas.” Quizás no tan “chica dura”, pero algo con estilo, para salvar el orgullo.
Pero bueno, al final Bridget se convirtió en una idola. Yo la amo. Mis amigas la aman. Si tuviera un perro, seguro la amaría. Bridget asegura que puede creerse el cuento, tiene la chispa para hacernos creer que nos tenemos que creer el cuento, porque por ahí te puede rondar un proyecto de Mark Darcy.
Bridget nos mostró que aunque- literalmente- nos caigamos, hagamos el ridículo y a veces- y sólo a veces- no seamos dignas y el orgullo que quede pegado en la suela de nuestra zapatilla, bien pisoteado, podemos levantarnos, recuperarnos, pasar por lo peor, pero al fin, llegar a ser estables. Un poco locas, pero felices.
Gran película. Chistosísima. Tiene partes hilarantes. Cuenta también con un soundtrack pop muy bueno, entre las que rescato a Sheryl Crow, “Have You Met Miss Jones?” de Robbie Williams, “All by myself” de Jamie O'Neal, “I'm Every Woman” de Chaka Khan y el inflatable Marvin Gaye y Diana Ross con “Stop, Look, Listen”.
Dirección: Sharon Maguire.
País: Francia / Reino Unido / USA.
Año: 2001.
Duración: 98 min.
Cast: Renée Zellweger (Bridget Jones), Colin Firth (Mark Darcy), Hugh Grant (Daniel Cleaver).
Dalal
Quiere brindar y fumar con su “amiga” Bridget Jones
No recuerdo como fue que vi “El diario de Bridget Jones”, sólo recuerdo el sentimiento y la sensación que quedó cuando ésta terminó- una sensación que creo fue general en todas mujeres que vemos el film- “¡¡¡OH, Dios mío, yo soy Bridget Jones!!!” Sólo que ni el sexy de Hugh Grant o el galán de Colin Firth se pelean por mi. A lo más me gusta un chico que no lo sabe. Y ahí decimos- con un gran grito en silencio- ¡Soy sólo lo peor de Bridget! Pero no todo es tan malo… Bridget luego se convierte en ganadora. Adiós la mujer-objeto, bienvenida la mujer-fuerte.
Pero no nos creamos todo lo que vemos. Obviamente la señorita Jones es un personaje, uno bien recargado (llanto…). Porque (obviamente) no existe un Mark Darcy. Hay muchos Daniel Cleaver, pero Mark, esos quedaron en el pasado. Los Darcy se extinguieron con los dinosaurios. Es como esa cadena que mandan por mail: “Encuentra un hombre que te llame bonita, en lugar de sexy” ¡Patrañas! ¡Patrañas! A Bridget no le sirvió ser bonita, Bridget prefiere ser sexy. Igual las esperanzas nunca se pierden, esperemos que haya quedado un vestigio del gen “Darcy” dando vuelta, para no perder la fe.
Y suena en la película el roquero ritmo de Sheryl Crow cantando una suave letra: “Kiss that girl”. Me obsesioné con esa canción- que alguna vez la escuche en un CD de viaje de mi hermana y la encontré muy “girl power”- ¡Aparte Sheryl es seca! (f it makes you happy/ It can't be that bad/ If it makes you happy/Then why the hell are you so sad?).
La canción dice más o menos así:
But that girl is only in your mind/ She's leaving everything behind/ She's not the girl that's gonna make it right/ Sure you can kiss that girl goodbye/
(Pero aquella muchacha está sólo en tu mente/ Está dejando todo atrás/ Ahora no es la chica que va a hacer las cosas bien/ Así que puedes despedirte con un beso)
¿Es o no girl power? Una canción con actitud de “talk to the hand, you lost”. Mezcla de Nanny Fine con J Lo (en la época de P. Diddy). Algo así como “hasta aquí llego la Bridget antigua, bienvenida la nueva, despídete de mi yo-pasado con un beso y sigamos adelante, soy otra, y si no te gusta, te vas.” Quizás no tan “chica dura”, pero algo con estilo, para salvar el orgullo.
Pero bueno, al final Bridget se convirtió en una idola. Yo la amo. Mis amigas la aman. Si tuviera un perro, seguro la amaría. Bridget asegura que puede creerse el cuento, tiene la chispa para hacernos creer que nos tenemos que creer el cuento, porque por ahí te puede rondar un proyecto de Mark Darcy.
Bridget nos mostró que aunque- literalmente- nos caigamos, hagamos el ridículo y a veces- y sólo a veces- no seamos dignas y el orgullo que quede pegado en la suela de nuestra zapatilla, bien pisoteado, podemos levantarnos, recuperarnos, pasar por lo peor, pero al fin, llegar a ser estables. Un poco locas, pero felices.
Gran película. Chistosísima. Tiene partes hilarantes. Cuenta también con un soundtrack pop muy bueno, entre las que rescato a Sheryl Crow, “Have You Met Miss Jones?” de Robbie Williams, “All by myself” de Jamie O'Neal, “I'm Every Woman” de Chaka Khan y el inflatable Marvin Gaye y Diana Ross con “Stop, Look, Listen”.
Dirección: Sharon Maguire.
País: Francia / Reino Unido / USA.
Año: 2001.
Duración: 98 min.
Cast: Renée Zellweger (Bridget Jones), Colin Firth (Mark Darcy), Hugh Grant (Daniel Cleaver).
Dalal
Quiere brindar y fumar con su “amiga” Bridget Jones
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